Último índice de precios de medicamentos y canasta de consumo para adultos/as mayores, la Defensoría del Pueblo de la Ciudad de Buenos Aires publico los últimos resultados de las Canastas de Consumo para Personas Adultas Mayores y el Índice de Precios de Medicamentos (IPM), dos herramientas elaboradas por el Monitor de Derechos del organismo que permiten medir con mayor precisión el costo de vida y la evolución de los precios que enfrentan las personas mayores en la Ciudad.
En un contexto económico donde los haberes jubilatorios suelen ubicarse por debajo del costo real de los consumos esenciales, la Defensoría desarrolló indicadores propios que actualizan las metodologías vigentes, incorporan criterios específicos para este grupo etario y buscan transparentar información clave para el diseño de políticas públicas.
Una pareja de personas adultas mayores necesitó, en noviembre, $1.359.675 para cubrir los gastos del mes. La Canasta de Consumo para Personas Adultas Mayores calcula cuánto necesita una persona mayor —según edad, sexo, tipo de hogar y condición habitacional— para cubrir gastos de alimentación, vivienda y servicios, medicamentos, bienes personales, equipamiento del hogar y esparcimiento. Una persona mayor de 75 años que vive sola necesita $746.271 por mes.
El presupuesto de la Canasta para 2 adultos mayores se integra de:
*Alimentos: $499.166.
*Servicios del hogar: $449.600 (Luz, gas, expensas).
*Salud: $149.75.
*Bienes Personales: $204.583.
Necesitan $45.323 por día para cubrir sus gastos.
En tanto, el Índice de Precios de Medicamentos (IPM) releva y estima mensualmente la evolución del precio de una canasta de medicamentos seleccionados por su uso frecuente, con el objetivo de monitorear su accesibilidad económica y contribuir al análisis público sobre el costo de productos esenciales para la salud.
En noviembre, los medicamentos registraron un aumento promedio del 1,9%, según el nuevo Índice de Precios de Medicamentos elaborado por la institución.
Con una suba promedio del 3,5%, los que más se incrementaron fueron los analgésicos, seguidos de los psicofármacos, con el 2,8%.
La producción de estos indicadores se enmarca en el trabajo de la Defensoría del Pueblo para monitorear el estado de los derechos en la Ciudad, generar evidencia pública confiable y contribuir al diseño de políticas que garanticen condiciones de vida dignas para las personas mayores. Se trata de una línea estratégica de la institución orientada a fortalecer la protección de derechos, mejorar la transparencia y acompañar con datos rigurosos el debate público.